El título del post de www.lamula.pe (te equivocaste de maricas), no podría resultar más apropiado el día de hoy. Como muchos saben he
regresado a las aulas, pero detrás de un pupitre tratando de dar lo mejor de mí
y volver al estado ñoño jajaja como me decía Mabel y Diana, y explotar mi fase
más chancona, supongo que nunca trunca, por el contrario latente y que de vez
en cuando se suelta las trenzas y se vuelve forajido enagenado, y maniático,
devorando libros de esto y de lo otro, en fin…hoy para evitar la fatiga (y sobretodo
el bochinche urbano que caracteriza al transporte público en nuestra siempre
gris e hipócrita ciudad), decidi tomar un taxi rumbo a san Isidro, donde
tendría lugar mi clase. Llevaba mi morral con mi cuaderno, mis dos libros, mi
cartuchera, mis apuntes, y en la mano un libro de Phillip Pullman, el cual
estaba por terminar de leer.
Paré un taxi y
pregunte cuanto me cobraba, a lo que el conductor contesto una cantidad
inaudita, asi que sorry bitch, next, agradeci y decline de la oferta, pare un
segundo taxi y luego de tranzar la tarifa justa me subi en el asiento trasero,
para no perder los aires de cenicienta rechoncha que a veces me dan y me
alucino bajando de una limousine jajaja(ya, ya, ya…en fin…May, por si acaso). El conductor con ínfulas de Meteoro
tercermundista atravesaba jirones, calles, bocacalles y pistas unidireccionales
con unas ínfulas de automovilista de Formula 1 frustrado, en fin, yo continué
con mi lectura y el escuchaba la narración de uno de los tantos partidos de la Copa
del Mundo – que dicho sea de paso, ni me interesa, bueno, al menos no el
partido en sí, espero el cambio de camisetas jajajaja…cuando estábamos llegando
a los límites distritales de Magdalena, el susodicho individuo avisoró una
pareja de muchachos un tanto cariñosos, de esos cuya correa blanca y hebilla de
cowboys delatan a un kilometro a la redonda, y no se le ocurrió mejor cosa que
proferirles insultos de un calibre inaudito…y bueno, baje mi libro con esa
delicadeza que se aprenda con Frida Holler, puse el marcador en la pagina
adecuada y lo guarde en mi bolso…luego me enajene, se me salió el macho que
lelvo dormido en mi ser (chesu hasta yo me sorprendo a veces jajaja) y me
dirigi dulcemente al señor conductor diciendo: “Quién chucha te crees para
insultarlos ah?”, “ Qué mierda te han hecho para que los maldigas de esa forma?”,
el tipo trago saliva, volteo y me dijo; “Pero, es que son cabros”…y yo arremeti
acotando. “Y que crees que soy yo, actor porno hétero?”, yo también soy cabro,
soy mariposa, soy rosquete, son homosexual y a mucha honra huevón, y este
marica y otros a los que transportan son el sustento de tu chamba, así que
trata bien a la gente!
El silencia reino como
cuando mis sobrinos se duermen, y fue interrumpido solamente para decir: “disculpa
choche, no era mi intención…es que hay cabros y cabros y no deberían de estar
en la calle chapando”, yo sólo respire profundo y acoté: “y hay heterosexuales
y heterosexuales y tampoco deberían estar invadiendo la cavidad bucal de sus
parejas en la calle”…tome aire y segui machacando: “Nosotros pagamos impuestos,
de esos impuestos salen las carreteras,
los hospitales, los sueldos de los que trabajan para el estado, los arreglos de
pistas y veredas, y por ende deberíamos de tener los mismos derechos que
cualquier hijo de vecino…o crees que un heterosexual es mejor ejemplo para un
niño que un homosexual?, no ves noticias, no lees?...antes de hacer un
comentario homofóbico piénsalo dos veces o vete a tu cuarto y allí hazlos, pues
estamos en todos lados y te guste o no, existimos, y seguiremos luchando por la
igualdad”
El sólo atino a
balbucear: “es que todos los gays quieren que uno les haga el favor”, yo me reí
más cachaciento que de costumbre y le dije: “disculpa, estaremos arrechos, pero
no comemos huevaditas que se nos queden en el diente” (7 inches or more, a que
si mis groupies jajajaja)…no se dijo más nada, llegamos a San Isidro, le pague
lo acordado, me baje bien digno con la frente en alta y me fui a clases a
volverme neurótico…un poco más!
Pensaron que este
pussyboy se iba a quedar callado, pues no…te equivocaste de marica, y aunque
sea difícil vivir en este país, seguiré desde mi trinchera cibernética y mi
aula, procurando la educación con tolerancia y libertad.
I’m back on
the game bitches! Muah!
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