Del Yo: Yo me quiero

El otro día mi amigo el flaquis Beto me pregunta: “gordo nunca te has sentido feo?”, y bueno, lo mire le dije: “Sí claro, me he sentido feo, pero a la mierda, de allí me acuerdo que soy malogrado y cago a los bonitos”, el obviamente soltó la carcajada y comenzamos ha hablar de la autoestima, y en one sacamos la definición:

La autoestima es un conjunto de percepciones, pensamientos, evaluaciones, sentimientos y tendencias de comportamiento dirigidas hacia nosotros mismos, hacia nuestra manera de ser y de comportarnos, y hacia los rasgos de nuestro cuerpo y nuestro carácter. En resumen, es la percepción evaluativa de sí mismo (Te amo Wikipedia). Como todo en esta vida, el exceso y la carencia son malos,  no se puede tener mucho sexo, no se puede comer mucho, no se puede ingerir mucho alcohol, no se pueden ingerir muchos medicamentos, tampoco se puede amar demasiado, todo en la medida justa y necesaria nos hará sentir bien.

 

Y bueno, no es secreto que mi autoestima tiene la misma medida que mi circunferencia y no me refiero a la abdominal jajaja… destruidos en one los vi a varios jajaja! Y Beto si estás leyendo esto, pues quiero que sepas que a pesar de tu horrendo bigote de Luigi de Mario Bros, eres guapo jajaja, y que eso de la circunferencia también te destruye a ti jajaja!

Y es que en este mundo en el que vivimos tan lleno de prototipos y paradigmas, es difícil ser uno mismo y quererse por lo que uno es en sí, y no por lo que hacemos para parecernos a otra persona.  Tómenme a mí por ejemplo,   por más regio que me vista (el más “botado” no?) jamás andaré sobre una pasarela. En los cánones publicitarios no entro pero ni de chiste,  ósea si tienes un par de kilos de más no puedes ponerte un zunga en la playa, en mi caso esos 2 kilos se han convertido en 20 a la mierda, soy un gordo mullido y peludo, como un oso de peluche en tamaño real (1.82m), o mejor aún “Sullivan” de Monster Inc. Y aunque nunca me verán retozando en la arena de “Eisha” con una zunga roja, tampoco soy un cetáceo bípedo, soy lo que soy, no tengo un cuerpo de modelo (quizás de modelo para San Fernando…la buena familia), pero me quiero y me quieren, muéranse de envidia aquellos musculosos, y aquellos delgados “pura fibra”,  pues ellos aunque guapos, y “hot”, aun están a la caería del amor, yo ya estoy cazado jajaja.  Siempre he lidiado con el “problema” del peso, el cual nunca me ha preocupado, me considero “beautiful” (como diría mi diosa Xtina Aguilera: “I am beautiful no matter what they say, Words can't bring me down, I am beautiful in every single way, Yes, words can't bring me down”). 

Pero la autoestima no se limita a la apariencia física, sino también a la manera en que pensamos y actuamos. Y es que uno debe actuar según piensa, volcar sus alegrías, sus tristezas, sus fobias, sus instintos, sus deseos y hasta sus arrechuras en su actuar, sin tapujo, a calzón quitado como decía mi abuela (la famosa Ortiz, ella siempre será inmortal para mí), que no te de roche, no te sientas corto (y si la tienes corta, pues ni modo, muévete más y con más ritmo jajaja), es que me joden las personas que quieren gustarle a todo el mundo, y es que eso es imposible, le tenemos que caer “quaker” al menos a alguien en la chamba o en el cole o en tu misma familia sin ir muy lejos, quien nos ve como el jugo de papaya que le enviaba su vieja en la lonchera cuando iba al nido, los panes de Dios simplemente no existen y los que alguna vez conocí son más pervertidos que yo, ósea no mamen, bueno, si mamen y mamen hasta las arcadas y con lagrimita y todo para coronar el show XXX, pero no dejes de ser lo que quieres ser solo porque la sociedad dice que está mal, somos libres, seámoslo siempre versa nuestro maravilloso himno, seámoslo, realmente seámoslos, y es que en la viña del Señor hay de todo para todos los gustos, “we were born this way, baby”…si a lo Gaga, que me parece el fenómeno más grande, y no me refiero en el sentido genial de la palabra, está más loca  que una cabra después de dos botellas de tequila en un jueves de pavita en los barracones, en resumidas cuentas, con el cerebro hasta la huevas, pero a la mierda, le encanta a miles, y a otros tanto se les atora en la garganta, y ella feliz y contenta con sus locuras y sus poses de arrechazada, y sin ir muy lejos, la inmortal “Tigresa del Oriente”, esa tía ha de tener una crema Nivea Q10+ formol, y se la echa todo el día, y estoy seguro que todavía tiene sus aventurillas por allí, y es que siempre hay un roto para un descocido, y no estoy hablando de los “rotos” del país vecino o los “rotos” que se “recursean” en posición de pollito tomando agua, hablo de que para cada uno hay alguien especial, solo hay que verle el lado bueno de la vida, yo no soy guapo, no tengo un porte varonil, no tengo una voz potente, se me está “destejiendo el gorro”, pero heme aquí con pareja hace diez años (por favor dejen que nos casemos antes que mi cabeza sea una réplica de mi rodilla), y mi gordis tampoco es un cuero, es mi gordis, es el objeto de mi deseo, el “muso” de mis maquinaciones y fijaciones sexuales más sórdidas, y es que somos imperfectamente perfectos a los ojos del otro, de eso se trata el amor, no?

Pero como diría Rupaul: “Como mierda vas a encontrar a alguien que te ame, si tu no te amas”, aceptemos nuestros jamones, nuestros vellos desordenadamente distribuidos, nuestros lunares, nuestras pecas, nuestras cicatrices, nuestras narices ganchudas, nuestras tetas caídas, nuestros culos gordos, nuestras marcas de estrías, nuestras sonrisas disparejas, nuestros dientes torcidos, y el gran etc. de defectos que todos tenemos (bueno, sorry con excuse me con todas las regias de Lima, las que con su plata han cambiado de la hermanastra fea de cenicienta a “lady”), si ellos se sienten ofendidos y dicen que no tienen nada feo, pues mienten estoy seguro que hay algo en ellos que les disgusta y por lo que reniegan cada vez que se miran al espejo, yo me miro al espejo y veo a un gordo lleno de pelo con poca gracias, luego viene mi gordis, me besa el cuello me abraza me besa todo calenturiento y me siento portada de Men’s health…regio, regio, el amor, el amor…nos hace ciegos, sordos y mudos…y eso me encanta, me siento como esos dos gorditos que bailan en el intro de la película (estúpida y asquerosamente hilarante) “Date movie”  con Allison Hanningan (lo máximo la flaca, aunque nunca olvidaré que ella era Willow en Buffy: The Vampire Slayer…sorry divagué…) bailando “My milshake” y los gorditos en cuestión meneando su redondez, haciendo coreografía de spanking pues la gloria (hard on detected! ), siempre hay alguien a quien le gustaremos tal cual somos.

Así que ámate a ti mismo, para que no dejes que ningún huevon te venga con el cuento de estoy contigo por lastima, si está contigo es porque le gustas y porque haces que le aumente la presión entre las piernas jajaja, donde dicho sea de paso es muy importante, sino next jajaja. Nunca permitas que tu novio, mariachi, “machucafuerte”, amigo con derecho o chante, te venga con la sandez de: puta estas feo pero ni modo pes, en tiempo de guerra todo hueco es trinchera y que nadie te va a querer, a la primera huevada de ese tipo, un sopapo y que vaya a lavar sus calzoncillos a casa de su mamá, que detrás de ese imbécil hay varios que te quiern dar y no solo un abrazo jajaja. Así que atenta/atento…ojo al piojo, el amor existe, y llega, solo hay que estar alerta y no dejarse maltratar!

Chicos y chicas, no se dejen pisar el poncho, somos regias, repítanlo, somos regias, si con más fuerza, alcen las manos como si le estuvieran dando su fuerza vital a Goku para ejecitar la “Genkidama” (sorry demasiados post de Goku en el facebook), y digan: Yo soy regia, soy regio, y todo esto es para goce de muy pocos y envidia de muchos, así que watch out bitches, the queen is here!