El ser humano es un intrincado laberinto de emociones, de
hormonas inestables, de reglas, de concepciones a-priori, de rezagos morales,
de dudas, de pasiones, de actitudes, en fin un universo muy particular, el
mismo que puede ser interpretadas de un millón de forma distintas, supongo que
por eso la convivencia con alguien puede resultar, a veces, tan difícil. Y
supongo que tratar de conjugar dos universos bajo las mismas teorías, reglas y
teoremas, pues nunca resulta en algo bueno. Y es que en una relación la
responsabilidad del éxito y del fracaso es de ambos, nada de que él me “saco la
vuelta, sólo porque es de culito alegre o un pinga loca”, no señores y señoras,
si te “saco la vuelta”, fue por algo, nadie sale de “cacería” si la “presa” en
nuestra casa es más que apetitosa, y no me refiero, a ser un “cuero”, pues si
tenemos pareja es porque en nuestras imperfecciones hemos encontrado a alguien
a quien le resultamos perfectos tal y cual somos: chatos, altos, gordos, muy
flacos, velludos, lampiños, calvos o en proceso, pecosos, con acné, con pene
grande o uno pequeño”. Así que a poner las pilas si se quiere tener una relación
duradera, no se debe de dejar morir la pasión, de vez en cuando es bueno
susurrarle al oído a tu pareja, mientras está concentrado en la televisión: “te
deseo…cáchame aquí y ahora”. O simplemente, pasar frente al televisor,
totalmente desnudo, diciendo: “Sorry, me olvide un lapicero por aquí, y
mencionarle que te irás a dar un duchazo”, verás que sale corriendo atrás tuyo.
Y es que como bien lo describe un post
de Facebook: “bañarse con tu pareja, mientras ríen y se jabonan mutuamente es
bacán…peor más cuando se cae el jabón…y allí empieza el juego jejeje”.
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Y si la respuesta es no, pues vas a un “sex shop” y te
compras algo para divertirte jajaja. Puedes comprarte desde un “dildo”, un
vibrador, unas bolitas chinas, un “fleshlight” hasta un muñeco/ muñeca inflable.
Y es que hay ciertas ventajas en tener uno de estos aparatitos. En el caso de
los vibradores, dildos y bolitas chinas, pues los escoges de la talla que más
te apetezca, desde los Junior (5 inches) , los Medium (7inches-más que
suficiente diría yo jajaja), hasta los Monsters/
Jumbo (+8 inches) jajaja. Y es que
siempre estará allí en la casa, a la “mano”, dispuestos, sin quejas como : estoy
cansado”, “me duele la cabeza”, o pendejadas como: “solo la cabecita” y es que
con este tipo de artilugios del amor, uno decide, dónde hacerlo, cómo hacerlo,
qué tan rápido y por supuesto, que tan fuerte hacerlo, uno tiene el control
absoluto del “asunto”, luego se lava, de
guarda y no hay que estarle haciendo cariñito si se quiere un “repeticua”, y tampoco hay que estar pendientes de que el
otro lo goce, pues total, es un placer solitario, y egocéntrico…que de vez en
cuando, sienta muy bien, y si se sientan mejor, es más fácil jajaja. En cuanto
a los fleshlights, bueno los hay con forma de boca, de vagina, y de ano, tu
decides cual orifico prefieres para acompañarte en las arduas jornadas
masturbatorias, ya que tus dedos pueden llegar a ser aburridos jajaja. Y acerca
de los muñecos/muñecas, pues los hay de todas las facciones étnicas y de todos
los “calibres” por así decirlo. Si lo que quieres es una vida sin complicaciones
amorosas, y aún así “gozar como chancho”, pues ahorra y adquiere uno de estos “mamotretos”
en el sex shop más cercano. Advertencia, estos productos, pueden ser adictivos,
y tu vida bien podría ser copia fiel del personaje de “Married with Children”, “Budrick "Bud" Franklin Bundy”.
Si lo que quieres es disfrutar del sexo, sin temor a las
enfermedades venéreas, sin temor a las infidelidades, sin temor a la frustración
natural de tener una relación sentimental que tiene altas y bajas, si en verdad quieres que tu cuerpo huela a silicona
anti-bacterial – a juguete de plástico recién salido del envase - , pues cómprate
un juguetito, pero si eres de los muchos aguerridos de este mundo, juégatelas y
ama, ama con todo el corazón, con la mente, con el cuerpo, trata de ser feliz
haciendo feliz a otra persona, o quizás seas de los que como yo, que nos
creemos niños grandes, a los que les gusta tener una pareja con compartir sus “juguetes”
jajaja.
P.D.: Si gustan saber más “cochinaditas” al respecto y/o la
variedad de los productos, me preguntan y ya jajaja
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