Crecí viendo Shazzan, Sailor Moon,
Magic Knights, Charmed, Voltrom, Gigi, Saint Seiya, Sakura card Captors,
Yuyu Hakusho, Inuyasha, Slayers, Dragon ball Z, He-man, She-Ra, El asombroso Hombre
Araña y sus super amigos: Estrella de Fuego y el Hombre de Hielo, X-men, Angel
la niña de las flores, Shaman King, Ronin warriors, Arco Iris Rainbow Brite,
Calabozos y Dragones, y todos ellos compartían un punto en común, personas con
poderes excepcionales.
Supongo que de niño, y pre-adolescente todos desean tener un super
poder, el poder de volar, el de ser invisible, el de mover los objetos con la
mente, el leer la mente de los demás , el atravesar las paredes, el
desdoblarse; el ver el pasado, presente y futuro, y porque no el conjurar
creaturas místicas o elementos naturales o simplemente objetos como ropa y
accesorios, cambiar la apariencia o simplemente viajar entre las
dimensiones/planos astrales.
Supongo que con mi fijación sobre los cultos de the Right Hand Path, fue
muy fácil el ser seducido por este tipo de programas, donde la imaginación es
el límite. Y es que en mi particular cosmovisión , la magia, el mundo
espiritual y las criaturas con dones especiales existen y conviven con la mayor
naturalidad. Quizás nunca llegue a tener los poderes con los que todo mortal
(medio desequilibrado como yo) aspira a tener al menos por un día. Pero tengo dos
dones especiales, el primero es quizás my active power, puedo hacer que toda
persona en un radio de 3 metros a la redonda hable de sexo sin tapujos en 3, 2,
1 jajaja. Básicamente mi superpoder es la habilidad innata de convertir todo lo
que los demás digan en algo de connotación sexual, aun cuando la intención del
interlocutor haya sido la más inocente del mundo. Y es que si alguien lograse
entrar en mi mente, sin lugar a dudas no podría ducharse suficientes veces como
para sentirse limpio nuevamente jajaja.
Adoro mi superpoder, pues ha quebrado silencios incómodos, me ha
procurado amigos incondicionales y una seguridad en que la vida es bella si uno
se da el tiempo de admirarla con detenimiento y con ese asombro natural que
caracteriza a los niños y a los que conservan ese rasgo en su personalidad.
Mi segundo don o poder, sigue los lineamientos de la doctrina
naturalista-mística-panteísta, en dónde la madre naturaleza tiene una dualidad
hermafrodita, y es el de hacer renegar a la gente jajaja…se alucinaron mal con
la introducción de este párrafo no? Jajaja…y es que procuro ser feliz, y eso a
veces a la gente le incomoda, les hace hervir la sangre el verme despreocupado,
sonriendo 24/7 y es que tengo que reconocer que soy histérico y tengo hartos
defectos, pero soy plenamente feliz, tengo una familia sui-generis y una
relación sólida, y si a eso le añadimos las sobredosis de fármacos, chocolates
y las sesiones de sexo diarias, pues el resultado es el Carlitos que todos
conocen, que unos aman, que a otros desquicia y porque no decirlo, que algunos
(aunque sea muy reducido el grupo) acosan jajaja, e incluso un grupo de cuasi
groupies que quieren que les done esperma por si llegan a alcanzar cierta edad
y aun no tienen candidato para llevar a sus 23 cromosomas a la nueva generación…propuesta
que me ha causado reacciones sobrepuestas que van desde el halago extremo a los
escalofríos, no me alucino llenando un frasquito en un cuartito antiséptico con
una cuantas revistas porno hétero (tetas…ay no! Jajaja). En fin, esos son mis
super poderes , y con ellos he sido bendecido con super amigos.
La pregunta es: Cuál es tu super poder?
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