Ir al contenido principal

Entradas

Tápenlas!!!

Hoy la parte más atorrante e intransigente de mi ser hablará, dejaré que fluyan mis taras a través de esta nota. Como ya lo he mencionado tengo ciertos asuntos no resueltos con las tetas, si señores, señoras, damas, caballeros, niños, maricas, travestis de closet, tracas volteadoras, activos complacientes, y demás integrantes de la fauna humana, tengo problemas con las tetas, en resumen, me asustan las tetas, especialmente las grandotas, y es que ustedes se preguntarán: “Dónde diablos ve tetas el gordo este?”, pues en todos lados, en el aula en la calle en los buses, y es que cada día los escotes son más profundos, los polos más reveladores, y el descaro de algunas féminas se desborda tanto o más que su “pechonadilad”.   Y bueno, cada quien con su atuendo, yo desvío la mirada y pienso en hombres desnudos para que no me dé un soponcio cardiaco jajaja, total cada persona decide que parte de su cuerpo lucir y hasta usar como arma de guerra. Una vez una amiga del trabajo me dijo: “E...

Me gusta...

Por más que digan que soy casi tan transparente como un el catafilo de la cebolla, y que trato de mostrar todas las facetas de mi vida, tal cual vienen, a veces violentas, a veces trágicas y lloronas, a veces surrealistas, a veces cómicas, y otras veces simplonas, pues hay muchas cosas que no saben de mi como por ejemplo que: Me encanta el chocolate casi tanto como el sexo. El amargo, el semi amargo, el chocolate de leche, el que tiene pasas y nueces, el de maní no mucho en realidad, y también el chocolate blanco. Lo que no me gusta es el chocolate de taza, el famoso chocolate Sol de Cuzco, es sin lugar a dudas algo que mi madre y mi abuela preparaban en ollas tamaño “comedor popular” del PRONAA para las celebraciones navideñas, pero que yo prefería ponerlo en un vaso plástico y meterlo en el congelador y comerlo a la mañana siguiente como adoquín. Ahora a mis treinta años, con un trabajo estable y con un sueldo decente, pues prefiero derretir chocolate bitter con crema de lec...

3x2

No siempre tres son mejor 1ue dos, bueno tres polvos son sin lugar a dudas mejor que dos, pero tres personas en una cama y no dos, pues solo es un problema. Sin lugar a dudas la sexualidad humana, es un universo increíblemente extenso y variopinto.   La línea divisora entre hacer el amor  solo tener sexo, varia de persona a persona, las mismas que procesan los límites de su propia sexualidad basándose en paradigmas adquiridos a través de la educación a la que fueron expuestos. Si bien la promiscuidad fue un factor determinante para la proliferación de la raza humana, hoy en día es algo que sonroja, marca socialmente, censura y hasta excomulga, quien sea señalado como promiscuo es simplemente considerado un ciudadano de segunda categoría y aquel que se reconoce así mismo como promiscuo pues tienen todas las de perder. Pero cuál es el problema, cada ser humano, busca la mejor forma de potencializar su capacidad innata de disfrutar de su cuerpo y por ende de los trances ama...

Freud III

La Fase anal o Fase anal-sádica designa un concepto elaborado por Sigmund Freud . «Según Freud, segunda fase de la evolución libidinal, que puede situarse aproximadamente entre 2 y 4 años; se caracteriza por una organización de la libido bajo la primacía de la zona erógena anal; la relación de objeto está impregnada de significaciones ligadas a la función de defecación (expulsión-retención) y al valor simbólico de las heces. En ella se ve afirmarse el sadomasoquismo en relación con el desarrollo del dominio muscular» Y es que si bien el sexo anal no es para todos, pues también goza de cierta popularidad y de muchos adeptos.   Eso de vamos papi, dame duro, reviéntame, es para valientes. Y es que si digo sexo anal, la mayoría dirá eso es de cabros, de rosquetes, de maricones, y bueno si lo es, pero, al pan pan y al vino vino, y es que tanto los hombres homosexuales y los heterosexuales encuentran un placer indescriptible en el sexo anal. Y es que basta con ver a los hombres volt...

Freud II

La Fase Oral, es la primera fase de la evolución libidinosa, como definía Freud: el placer sexual está ligado entonces predominantemente a la excitación de la cavidad bucal y de los labios, que acompaña a la alimentación. La actividad de nutrición proporciona las significaciones electivas mediante las cuales se expresa y se organiza la relación de objeto; así, por ejemplo, la relación de amor se hallará marcada por las significaciones: comer, ser comido. Abraham propuso subdividir esta fase atendiendo a dos actividades distintas: succión (fase oral precoz) y mordedura (fase oral sádica). Y aunque esta sea la primera fase del desarrollo psicosexual del hombre, esta también se extiende hasta la vida adulta de todos los homosexuales y gran parte de los heterosexuales. El placer que se puede alcanzar a través del sexo oral, o la conjunción buco-genital, si así se prefiere, es sin lugar a dudas intenso, y a veces mucho más satisfactorios que el acto penetrativo. Según han referido m...

Freud I

La fase fálica es una de las fases pulsasionales de la teoría sobre el desarrollo psicosexual de Sigmud Freud. Esta tiene lugar en la infancia entre las edades de 3 y 5 años. En esta etapa la zona erógena predominante son los genitales y las sensaciones placenteras se obtienen sobre todo mediante la actividad de orinar. No es raro ver a niños pequeños tocándose los penes, jugueteando con ellos, tratando de descubrir lo que se siente el tocárselos. Y si bien la malicia no está activa en sus cerebros, lo está al 100% en el adulto. Y es que aunque Freud se levante de su tumba, venga me grite, me patee el culo y luego se vuelva a morir, tengo que afirmar que la etapa fálica y el complejo de castración que conlleva el mismo hecho de tener un pene, se extiende a través de toda la vida del hombre. Y es que la importancia que recae sobre el atributo fálico es simplemente impresionante. En “The Ugly Truth o La Dura Verdad” todo se reduce a que el corazón del hombre está localizado nada...

Celoso, quién? yo?...Sí boludo, tú!

La mañana se me había pasado planchando y horneando un brownie, a mi gordis se le había pasado estirándose y dando vueltas en su cama, sin la más mínima intención de abdicar la calidez de su colchón y cobijas para irse a duchar.   Al fin tuvo que hacerlo, nos metimos a la ducha y nos alistamos para ir a un almuerzo.   Bajamos y paramos un taxi, un Kia Rio de esos que han inundado el parque automotor limeño, y luego de tranzar el precio, nos subimos en la parte de atrás. Estábamos en el taxi camino al Marriot, donde almorzaríamos con unas amigas de mi gordis, amigas de la Universidad, y bueno, estábamos sentados en la parte de atrás y mientras el chofer hacia maniobras medias evasivas, nosotros nos tomabamos de la mano, comentábamos del clima, frio y nublado, casi el Edén para mi, mientras que mi gordo, hablaba con una nostálgica caribeña casi insoportable.   Otra vez nuestros ánimos de polos opuestos chocaron…en fin, estábamos apreciando el mar que de por si lucia no mu...